martes, 7 de abril de 2015

El Alfarero

Jeremías 18: 1-9
18 La palabra del Señor vino a mí, Jeremías, y me dijo:
«Levántate y ve a la casa del alfarero. Allí te daré un mensaje.»
Yo me dirigí a la casa del alfarero, y lo encontré trabajando sobre el torno.La vasija de barro que él hacía se deshizo en su mano, así que él volvió a hacer otra vasija, tal y como él quería hacerla. Entonces la palabra del Señor vino a mí, y me dijo:
«Casa de Israel, ¿acaso no puedo yo hacer con ustedes lo mismo que hace este alfarero? Ustedes, casa de Israel, son en mi mano como el barro en la mano del alfarero.
—Palabra del Señor.
»En cualquier momento puedo decir, de algún pueblo o reino, que lo voy a arrancar, derribar, o destruir. Pero si ese pueblo o reino se aparta de su maldad, contra la cual hablé, yo desistiré del daño que había pensado hacerles.
»En cualquier momento puedo también decir, de algún pueblo o reino, que lo voy a edificar y plantar. 10 Pero si ese pueblo o reino hace lo malo ante mis ojos, y no me obedece, yo dejaré de hacerles el bien que había pensado hacerles.

Muchos de nosotros hemos visto e incluso alguna vez hemos experimentado lo que es trabajar con barro o arcilla. Mis Hijos en muchas ocasiones han realizado tazas, copas, muñecos o tazones con masa para moldear, y ellos se sienten tan orgullosos, tan llenos de alegría cuando realizan alguna manualidad conforme a lo que ellos querían, y si en algún momento no les gusta cómo va quedando la destruyen y la vuelven hacer. Yo como papá los incentivo a realizar más creaciones para motivar su creatividad y me siento muy feliz cuando me dan esos regalos que solo los niños pueden ofrecer.
Dios quiere hacer con nosotros de forma semejante lo que hace un alfarero, veamos en esta enseñanza bíblica el reflejo de la vida de un cristiano, siendo el alfarero: Dios, el barro: nosotros y la piedra o rueda que gira: la vida, primeramente Dios nos saco del barro y escogió esa porción que eres tú y yo lo cual nos hace únicos, el Padre de los cielos con sus propias manos comienza a moldear nuestra vida para hacerla de manera agradable y acorde a sus principios y mandamientos, pero a medida que va girando y tomando forma hay cosas que hacen que esa vasija (que somos tu y yo) comience en algún momento presentar fallas. Cuando el barro es moldeado, muchas veces en él se arrastran pedacitos de piedras, hojas o ramitas que dificultan que se moldee conforme a lo que el alfarero quiere, esas pequeñas virutas son los impedimentos que el mundo muchas veces coloca en nuestra vida. Y que si se esconden dentro afectan nuestro ser. Las virutas representan ira, tristeza, vicios, etc, ósea todo aquello que te deforma, que te aparta de Dios, pero para continuar moldeando ese barro, esas virutas deben ser retiradas de nosotros, pero ¿qué pasa si imaginamos que el barro cobre vida y no permita que se retiren esas virutas? Estoy seguro que el alfarero aun cuando quiere continuar dando forma se vería impedido porque dañarían sus manos. Dios nos ama de una manera única y excepcional como ningún otro puede llegar a amarnos, somos su creación tan grande de tal magnitud que aún los ángeles no se comparan con nosotros, pero el amor y la manifestación de Dios se verá reflejada en una persona solo si esta persona permite que ese amor entre en su ser.
Una persona puede exigir mucho amor pero si no permite que ese amor entre jamás podrá recibirlo, y no solo aplica al amor de Dios sino también al amor de los representantes de Dios, sus hijos, sus padres, sus hermanos. ¿Cómo darle amor a alguien que aún cuando lo exige, no lo deja entrar? Dios ha querido darte lo mejor de él para ti, ha querido moldearte una vida perfecta, ha querido bendecirte en cada cosa que le has pedido conforme a su voluntad, pero a muchos no ha podido entregárselo porque aún no han dejado que los moldee como el barro, sino que han querido cobrar vida autosuficiente antes de que el alfarero termine su obra de arte.
Peor aún nos apoderamos de esas virutas que dañan las manos del creador y cuando menciono daños me refiero a las ofensas que hacemos y no soltamos porque solo miramos a nuestro yo y no a los demás.
Debemos entender que ningún barro toma su forma final sin antes no terminar con todo el proceso de alfarería, este proceso comienza desde que se toma el barro, se le da la forma, se quitan los excesos y residuos que podrían dañar la obra y una vez de esto se ponga en el horno para que al final sea una hermosa vasija, un hermoso vaso, una hermosa copa.

Dios quiere que tu vida y la mía sea una vida llena de armonía, una vida llena de bendiciones, una vida llena de paz, de victoria, una vida que rinda honor al nombre de Él, Dios quiere que usted y yo lleguemos a tener una Vida Nueva, todas las cosas viejas pasaron, todo viruta que me aparta de Dios la echamos fuera, todos hoy declaramos que nos dejaremos moldear totalmente por las manos del creador. Usted pasará un proceso de crecimiento, un proceso de formación pero tenga seguro que una vez culminado ese proceso su victoria será absoluta, somos llenos de la majestuosidad de Dios, somos llenos del Espíritu de Dios y es eso lo que nosotros reflejamos.

Bendiciones de lo Alto.

JRFV